Libélulamente alegre
elevo anclas al Océano de la NADA
flotando a la deriva de mi cosmos
cuando, en un espontáneo
engarce hacia la cumbre
se me escapó la frase.
Se me rompió el principio de la metáfora
que antes flotara en alas
Se me murió esta tarde la amansada
gacela de mi rima.
Se me extravió en la noche
cuando hubo matanza de nidos
en los álamos
Cuando nadie lloraba la muerte de una mariposa
o un cocuyo volante
Cuando a nadie importaba la reprimida lágrima
de un niño abandonado;
cuando agonizó el riachuelo
que tenía garganta de acordeón
y desde entonces
entre un mar de barro y un coro de gruñidos
improviso la VIDA.
Escritora y poeta Marietta Cuesta Rodríguez (Ecuador)
1 comentario:
Marietta:
-es un poema lleno de armonía y de esperanza a paesar de que habla sobre la musa perdida esa es muy escurridiza con todos amiga pero aparece como dela nada y cuando menos lo esperamos, si no no te hubiera salido este poema tan mentafísico y hermoso
Besos
Agni
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