A Ramón Oviero
Detrás de las caras herméticas
oigo gritos de dolor
el sudor de los mayores
amargo jugo de la caña dulce.
Suena el machete en los címbalos
al suelo caen los tallos
el ganado come las hojas
y en las pailas el guarapo
se mermará gota a gota.
Sonidos de acres metales
repentinas erupciones,
(rebop, bebop, bop)
improvisaba el bajista
limpiando toda malicia.
Los gritos del capataz
el rechinar de los látigos.
La iracundia de los rostros
viaja del susurro al grito.
Chisporroteo de ritmos
la música recomienza.
Con Chano Pozo la marcha
su tambor mancha de sangre
en el "Río Café de Harlem."
Sonámbulos embriagados
politonales solistas
inventan en su locura
melodías y canciones.
Salta el coro sucesor
regula las emociones
de Chano Pozo sus manos
ampolladas en las congas...
Dizzy Gillespie lo escucha
romper con lengua africana
el alto cielo de ritmos.
El ataque al corazón
de Luis del Campo en la pista
dejó sola a la danzante...
Mario Bauza, Tito Puente,
Pérez Prado con su mambo.
Entre el grito y el gruñido va el torturador de esclavos.
oigo gritos de dolor
el sudor de los mayores
amargo jugo de la caña dulce.
Suena el machete en los címbalos
al suelo caen los tallos
el ganado come las hojas
y en las pailas el guarapo
se mermará gota a gota.
Sonidos de acres metales
repentinas erupciones,
(rebop, bebop, bop)
improvisaba el bajista
limpiando toda malicia.
Los gritos del capataz
el rechinar de los látigos.
La iracundia de los rostros
viaja del susurro al grito.
Chisporroteo de ritmos
la música recomienza.
Con Chano Pozo la marcha
su tambor mancha de sangre
en el "Río Café de Harlem."
Sonámbulos embriagados
politonales solistas
inventan en su locura
melodías y canciones.
Salta el coro sucesor
regula las emociones
de Chano Pozo sus manos
ampolladas en las congas...
Dizzy Gillespie lo escucha
romper con lengua africana
el alto cielo de ritmos.
El ataque al corazón
de Luis del Campo en la pista
dejó sola a la danzante...
Mario Bauza, Tito Puente,
Pérez Prado con su mambo.
Entre el grito y el gruñido va el torturador de esclavos.
Poeta CONSUELO HERNÁNDEZ (Colombia)
En la fotografía el gran "Chano" Pozo
2 comentarios:
Magnífico poema. Por fin alguien que recuerde de donde viene lo mejor de la música que disfrutamos hoy todos. Felicitaciones a la poeta.
Muy buen poema, a mis años me trajo toda la nostalgia de las noches de Harlem con estos músicos fabulosos.
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